Mercedes tenía cuatro tías solteras. Le pregunté por qué eran solteras. Y me contó una historia festiva pero no me... Sigue leyendo
Fabián Soberón
FABIÁN SOBERÓN es escritor, profesor universitario y crítico. Nació en J. B. Alberdi, Tucumán, Argentina, en 1973. Ha publicado la novela La conferencia de Einstein (1era. edición UNT, 2006; 2da ed. UNT, 2013), los libros de relatos Vidas breves (Simurg, 2007) y El instante (Ed. Raíz de dos, 2011), las crónicas Mamá. Vida breve de Soledad H. Rodríguez (Ed. Culiquitaca, 2013) y Ciudades escritas (Eduvim, 2015) y ensayos sobre literatura, arte, música, filosofía y cine en revistas nacionales e internacionales. El Fondo Nacional de las Artes publicó textos suyos en la Antología de la Poesía Joven del Noroeste (Fondo Nacional de las Artes, 2008). Es Licenciado en Artes plásticas y Técnico en Sonorización. Fue docente de Historia de la Música en la Facultad de Artes de la Universidad Nacional de Tucumán. Actualmente se desempeña como profesor en Teoría y Estética del Cine (Escuela Universitaria de Cine), Comunicación Audiovisual y Comunicación Visual Gráfica (Facultad de Filosofía y Letras). Fue finalista del Premio Clarín de Cuento 2008. Con su novela Atalaya obtuvo una mención en el Premio de Novela Breve de Córdoba, con el Jurado integrado por Angélica Gorodischer, Tununa Mercado y Perla Suez. Ganó el 2do Premio del Salón del Bicentenario. Actualmente colabora con Perfil (Buenos Aires), Ñ (Buenos Aires), Boca de sapo (Buenos Aires), Otra parte semanal (Buenos Aires), La Capital (Rosario), El Pulso Argentino (Tucumán), La Gaceta Literaria (Tucumán), Los Andes (Mendoza) y Nuevo Diario (Santiago del Estero). Es miembro del consejo editor de la revista Imagofagia (Buenos Aires). Ha dictado talleres de escritura en Santiago del Estero, Tucumán y Buenos Aires. Ficciones de su autoría han aparecido en Ñ (Buenos Aires), El Pulso Argentino (Tucumán), La Gaceta Literaria (Tucumán), entre otras publicaciones. En el 2014 participó en el Encuentro Federal de la Palabra (Tecnópolis) y en el ciclo “Diálogo de provincias”, de la 40º Feria Internacional del Libro de Buenos Aires. En 2014 ganó la Beca Nacional de Creación otorgada por el Fondo Nacional de las Artes (Argentina). Textos suyos han sido traducidos al inglés y al portugués.
La ciudad es puro humo. Los cascos broncíneos y las lanzas argivas brillan en el campo de batalla. Los crueles... Sigue leyendo
Dos monjes budistas caminan por el parque Madison en East Village. Se sientan cerca de mi banco. En el mismo... Sigue leyendo
STATEN ISLAND Dicen que Thoreau vivió en Staten Island y que tenía un rabioso perro lanudo que paseaba jubiloso... Sigue leyendo
Al mediodía, mientras el padre y el niño juegan con los autos, la madre le pide que se cambie de... Sigue leyendo
Aleksandr Solzhenitsyn se encierra en su casa. Deja de escribir cartas. No atiende el teléfono. No sale con putas. Escribe... Sigue leyendo
La familia de Astor cena en una calle de Manhattan. Están todos: el matrimonio y los dos hijos. Suena el... Sigue leyendo
Un matemático escribe una fórmula en el borde de un cuaderno. Anota que no puede escribir la demostración de la... Sigue leyendo
A Renán Darío Arango Como un Tolstoi colombiano, con su melena blanca tocada por el viento, Renán Darío Arango nos... Sigue leyendo
Translation by Nita Renfrew My destination was Vermont. But there was an unavoidable stopover in Newark, one of New York’s... Sigue leyendo
a Luis Chitarroni Mi destino era Vermont. Pero había una escala ineludible en Newark, uno de los aeropuertos de Nueva... Sigue leyendo
Mijail Bakunin piensa en una figura antes de la noche. Sentado en la cama, en una casa modesta de Berna,... Sigue leyendo
Mansilla conversa con Proust. Están sentados en un café de París. Proust estira su mano y saca una moneda plana,... Sigue leyendo
Están en un restaurante. Las bicicletas ronronean en el asfalto. El sol, alto, humedece la vereda áspera y desleal. El... Sigue leyendo
Un hombre habla todos los días, a la madrugada, en una habitación del hotel Paradise, en Brooklyn. Tiene la voz... Sigue leyendo
Vencida de la edad sentí la espada. Quevedo El resplandor violeta de un bar nocturno lo enceguece y lo calma.... Sigue leyendo
En la esquina de mi casa, un hombre vende el diario por la mañana. Hemos llegado a un acuerdo. Todos... Sigue leyendo
Lavo la ropa siempre en el mismo lugar, en la misma máquina. Eso me da cierta seguridad, cierta calma. Me... Sigue leyendo
Camina bajo la solitaria luz crepuscular. Las ásperas sandalias le astillan los pies. No lo salva ni del sol ni... Sigue leyendo
Hacia 1960, con el Premio Nobel a cuestas, Camus sale en su auto por una ruta solitaria. Sufre un accidente... Sigue leyendo