McNally Jackson (52 Prince St New York, NY 10012)
Viernes 13 de Marzo, 6:00 pm
Entrada gratuita y abierta al publico
NUEVA YORK: Los escritores Marcos Crotto y Ezequiel Yanco conversarán sobre la obra de Matías Capelli, autor de Trampas de Luz y Frío en Alaska, (Eterna Cadencia).
Matías Capelli, argentino, es uno de los nuevos narradores más prometedores del momento. Su primer libro, Frío en Alaska reúne cuatro relatos que giran alrededor de Leckman, un personaje muy complejo a través del cual el autor explora la fragilidad de las relaciones, el distanciamiento, la introspección, los recuerdos, la oscuridad de ciertos pensamientos.
Lekman, cada mes, ordena los tickets de compra que Fernanda le envía desde Inglaterra para que los presente en la fundación que la becó por “un año o dos”. Por lo general, lo hace sin pensar, pero a veces encuentra algo que le provoca una punzada en el pecho: un principio de incertidumbre que sobrevolará los cuatro relatos de este libro.
Con una fluidez narrativa inusitada, consigue situarnos en ese borroso límite entre el sueño y la realidad, en ese instante en que la conjetura se superpone al hecho, provocando un efecto desestabilizador y excitante al mismo tiempo.
Trampa de luz, es la primera novela de Matías Capelli, una novela que lo confirma como uno de los escritores jóvenes mejor ubicados en la línea del trabajo plástico con la palabra, de alto contenido poético.
Trampa de luz es el relato de un día en la vida de un joven que descubre, de pronto, que todo está un poco podrido.
Algo apretado por la falta de dinero, aferrándose de a ratos a recuerdos de ex novias, en una ciudad repleta de bolsas de basura y con la radio repitiendo morbosamente la historia de la recaudadora de caudales baleada por la mañana, el protagonista va hilando diversos lugares de la ciudad, desde barrios acaudalados, hasta suburbios rancios.
La sorpresiva visita de su ex para devolverle la plata de las vacaciones lo saca en cierto modo del letargo. Descubrir que está embarazada no le impide, sin embargo, fantasear en la ducha con ella, con panza y todo, hasta que de nuevo le sobreviene esa puntada detrás del ojo. Ese día se cumple un año de la muerte de su abuelo. Debería ir a la ceremonia –aunque eso implique ver a sus primos o que le pregunten por el trabajo que ya no tiene –; debería, ahora que puede, pagar la luz antes de que la corten. Con el fajo de billetes en el bolsillo sale a una ciudad repleta de basura y absorta en la noticia de un asalto que se repite en todos lados. Y de a poco, un día que parecía uno más cobra un cariz cuasi epifánico.
En su primera novela, Matías Capelli combina a la perfección una prosa de imágenes poéticas y originales con esa sensibilidad peculiar –que ya despuntaba en los relatos de Frío en Alaska– para detectar en los detalles un sentir absolutamente contemporáneo. Un relato sutil, en el que la mirada ausente, “con gusto a sentimientos macerados en un recipiente hermético”, que parece esmerilar todo, traiciones, estafas y deseos, comienza a ceder lentamente, en la bruma de la madrugada, a la espera de un próximo día menos cruel que el anterior.
Matías Capelli nació en Buenos Aires en 1982. Trabaja como editor en la revista Los Inrockuptibles y colabora con medios gráficos del país y del exterior.