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Elecciones USA: el rol de los latinos

Las recientes elecciones parlamentarias han sido un trago amargo para el Presidente Obama. Si bien había señales que indicaban una posible victoria de los republicanos en el Senado, los resultados superaron las expectativas.

No es la primera vez que el partido de oposición tiene mayoría en ambas ramas del Parlamento y la historia enseña que la democracia norteamericana tiene suficiente fuerza para superar sin grandes traumas la alternancia de poder entre los dos partidos más importantes. En este momento los republicanos saben que no pueden adoptar una política de total obstruccionismo porque el país no se lo perdonaría y el Presidente Obama empezó de inmediato a lanzar puentes de diálogo para llevar adelante, aún con todas las limitaciones del caso, algunas de las batallas que más le interesan.

Entre ellas la aprobación de la ley de inmigración. Es posible que las continuas demoras de esta ley hayan influenciado el voto de una parte de la comunidad hispánica, es posible también que, si la hubiese hecho, los republicanos la habrían utilizado como arma para fortalecer los miedos que, por lo visto, llenan de pesadillas el sueño de buena parte de los norteamericanos cuyos fantasmas toman formas distintas: el terrorismo, la inmigración, la economía etc. La vida de las naciones así como la de los individuos están plagadas de “si” a los cuales es imposible ofrecer respuestas, pero sin duda las elecciones y sus resultados obligan a reflexiones y análisis.

Consideramos reductivo decir que el voto de los latinos fue influenciado únicamente por las promesas incumplidas de Obama en lo que se refiere a la ley de inmigración. Si de verdad fuera esa la razón, habría crecido el abstencionismo pero pocos habrían votado por los republicanos a sabiendas que, dentro de ese partido, hay una ala dura que mostró sin grandes rodeos su contrariedad hacia una apertura a los inmigrantes. Son los mismos, por suerte una minoría a pesar de la bulla que hacen, que no dejan espacio ni a los más mínimos sentimiento de solidaridad humana hacia los niños que llegan de Centroamérica huyendo de muertes seguras.

Es obvio que, en estas elecciones de Midterm, hubo otros factores que impulsaron a los latinos a expresar un voto menos demócrata de los últimos dos, cuatro y seis años. Ellos votaron por unas personas, sin duda menos radicales, quienes desde su posición republicana, supieron hablarles de otros temas importantes y sobre todo que supieron convencerlos.

Es la indicación de un malcontento que va mucho más allá de la ley de inmigración. Y también es la demostración de los cambios que se están gestando dentro de la comunidad latina. Quizás haya llegado el momento de entender que la comunidad hispana no solamente se preocupa, como es justo y legítimo, de las temáticas más cercanas a sus intereses sino también de muchas otras como cualquier ciudadano de Estados Unidos.

La comunidad latina poco a poco, con grandes esfuerzos, está saliendo de su condición de pobreza y precaria educación gracias a los progresos de las nuevas generaciones y también al aporte de los muchos “cerebros” que han estado llegando, año tras año, de los países latinoamericanos. Todos ellos tienen una gran influencia en sus mismas familias y comunidades. Eso significa que el voto hispano depende también de la actitud de los políticos con relación a muchas otras problemáticas, como el ambiente, los derechos humanos, el embargo cubano, la economía, las relaciones con los países de Centro y Sur América, la posición frente a las guerras y al terrorismo. Seguir mirando a la comunidad latina como a un reservorio de votos de personas pobres, incultas, que solamente se preocupan de sus pequeños, aunque válidos e importantes, intereses, significa perder de vista los cambios que están ocurriendo en su interior y perder la oportunidad de entablar con ella un diálogo más articulado y profundo.

Ha llegado la hora de romper ciertos esquemas y lugares comunes que limitan una integración digna y respetuosa de los latinos quienes viven en Estados Unidos, aman este país y se preocupan por su bienestar y su futuro.

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