Mucho falta para poder viajar nuevamente. Hoy en día, la imagen que vemos alrededor del mundo es de un espacio deshabitado: parques sin niños, cines sin espectadores, hoteles sin turistas. A la espera de que los vuelos operen con normalidad, la reapertura de los casinos y que la gente inunde los espacios, tenemos en nuestras manos tiempo de sobra para planificar nuestro próximo viaje. Por esa razón, nada mejor que presentarte un destino que combina su pasado vikingo y su arquitectura moderna. Galadornada con el Premio Capital Verde Europea en 2019, Oslo es una de las mejores ciudades para hacer turismo ecológico.
¿Qué ofrece Oslo?
Oslo se ha puesto como objetivo reducir las emisiones de gases contaminantes para el año 2050. Por lo tanto, se esfuerza por preservar espacios naturales y reducir la contaminación, incluso en el entorno urbano. Rodeada por bosques y fiordos, esta ciudad procura recuperar ríos, arroyos, parques y áreas verdes para que sus ciudadanos puedan disfrutar de espacios limpios que mejoren su calidad de vida. Para ello, Oslo se apoya en el uso del transporte eléctrico y limpio, incluso en la red de transporte público. Los autobuses se mueven a biogás, un combustible que se genera a partir de materia orgánica. Todo esto hace que sea la ciudad perfecta para disfrutar del turismo verde y contribuir desde nuestro lugar a los esfuerzos para revertir el cambio climático.
Turismo ecológico
Uno de los principales puntos al planificar un viaje verde es elegir hoteles que cuenten con certificación ambiental. Por el momento, existen tres certificados y, para conseguirlos, los hoteles tienen que cumplir pautas estrictas respecto de su administración en el uso de agua, energía, residuos y proveedores. Las cadenas hoteleras Scandic y Thon Hotel son tan solo algunas de las alternativas; la buena noticia es que cada vez más alojamientos buscan estas certificaciones y, por lo tanto, hay muchas opciones para elegir.
Por su parte, el transporte no presentará muchos problemas ya que las principales atracciones de la ciudad se encuentran a corta distancia y, por lo tanto, puede accederse a ellas caminando o en bicicleta. Asimismo, si se quiere llegar a lugares más alejados, la red de transporte público de Oslo, operada por Ruter As, comprende autobuses, trenes, tranvías y ferries. Ya hemos mencionado que los autobuses funcionan con biogás; adicionalmente, Ruter As tiene en marcha un proyecto para erradicar completamente los combustibles fósiles y operar toda su red con combustible renovable.
En cuanto al entretenimiento, una de las principales ventajas de Oslo es que, al tratarse de una ciudad con tanta naturaleza a su alrededor, no faltan parques para recrearse y disfrutar. Además, los mercados de la ciudad invitan a los ciudadanos a encontrar nuevas maneras de reciclar y reutilizar. Apostar por la producción local es una buena forma de contribuir, incluso en las comidas. Cada vez más restaurantes y cafeterías sirven platos preparados con alimentos orgánicos, es decir, aquellos producidos sin elementos ni conservantes químicos.
Sin duda, disfrutarás de todos los aspectos del turismo ecológico en esta ciudad.
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Photo by: André Neufeld© from Pixabay