Cine brasileño
Movido por los constantes cambios políticos y económicos, el cine brasileño está evolucionando a favor de leyes o posiciones ad hoc. La debilidad intrínseca de su potencial creativo lo coloca en una posición delicada frente a la invasión de los éxitos de taquilla estadounidenses. Gracias a la llegada al escenario internacional de visionarios cineastas brasileños que hablan sobre los problemas de su país, el cine brasileño tiene la oportunidad de ver el surgimiento de obras fuertes y bien construidas con la generación de «Cinema Novo» en los años 60.
1985 marca el final de la dictadura militar con la elección del presidente José Sarney. Pero las primeras elecciones libres realmente no tuvieron lugar hasta 1990 y llevaron al poder al muy liberal Fernando Collor con la liquidación de la legislación que protegía el cine nacional. La industria cinematográfica brasileña tardará diez años en “curarse”. Poco a poco, se ponen en marcha nuevas estructuras para apoyar y promover el surgimiento del cine, como la Ley Audiovisual, que entrará en vigencia bajo el gobierno de Fernando Cardoso. Un sistema impositivo más favorable y la creación en 1997 de una productora, «Globo Filmes», conducirán gradualmente a una reactivación de la creación y producción cinematográfica.
La década de 2000 realmente marca el resurgimiento del cine brasileño con, ante todo, la impactante película A Cidade de Deus de Fernando Meirelles y Katia Lung. Lanzada en 2002, esta película extremadamente dura, pero magníficamente realizada, revela al mundo la sórdida realidad de las bandas de los niños en las favelas de Río de Janeiro en las 70. Las cifras y estadísticas del cine brasileño en estos últimos años mostraron una mejora en la producción de películas y la asistencia en los cines. En diez años, el número de espectadores se ha multiplicado por tres y nuevos directores aparecen regularmente, como Daniel Filho cuya película, Se Eu Fosse Você en 2006, obtuvo el mayor éxito nacional de una película brasileña con más de un millón entradas. Y recientemente, la película Aquarius de Kleber Mendonça Filho fue un éxito no solo en Cannes, sino también en su país de origen. La última, A qua hora ela volta, de la directora Anna Muylaert en el Festival de Cine de Sundance 2015 y la Berlinale 2015, marca los espíritus ilustrando los cambios en la sociedad brasileña actual.
Activista, comprometido, reivindicativo, el cine brasileño difiere de algunas críticas sociológicas aburridas por un dominio de la puesta en escena y la narración, con momentos luminosos siempre hermosos, incluso si el tema evocado permanece negro y a veces sin esperanza..
Y Santos, ¿ciudad del cine?
En 2015, Santos se unió al selecto grupo de «Ciudades creativas de cine» de la Unesco, siendo la única ciudad en toda América.
Santos es un municipio portuario ubicado en el área metropolitana de Baixada Santista, en la costa del estado de São Paulo, en Brasil. Tiene el puerto más grande de América Latina. Tiene alrededor de 450 mil habitantes. Las disparidades sociales están muy presentes. La ciudad parece cortada por la mitad. La zona costera tiene un IDH tan importante como algunos países europeos, mientras que las áreas remotas tienen un IDH de países en guerra como Irak. Santos enfrenta varios problemas, incluido el alto costo de la vida o la constante especulación inmobiliaria. Los proyectos de revitalización en la zona central de la ciudad, reconocida como centro histórico, han atraído diversos proyectos culturales y artísticos. Se ofrecieron incentivos fiscales comerciales a cambio de restauraciones de edificios, lo que mejoró mucho su apariencia y trajo negocios al área.
Santos es una ciudad relativamente cinematográfica, especialmente con una tradición en la visualización de películas. Durante muchas décadas, poseyó varios edificios cuyo objetivo principal era el cine, y aunque haya perdido muchos lugares claves, ninguna ciudad de su tamaño ha ofrecido tanto espacio alternativo para el cine. Santos también ha desarrollado un proyecto, el Cineclub, el primero en el país, que acompaña toda la creatividad del cine nacional y extranjero.
¿Por qué el cine?
La Cinemateca de Santos fue creada por el francés Maurice Armand Marius Legeard en 1980. Nacido en Lyon el 9 de abril de 1925, Maurice Armand Marius Legeard se trasladó con su familia a Santos en 1932. En suelo brasileño, se alimentó de su gran pasión por el mundo cinematográfico. En 1948, creó el Cine Club Santos y llevó a la ciudad obras del neo-realismo italiano y parte de la filmografía de países como Japón, Polonia, Francia, India, Inglaterra, Hungría, Rusia y China. Desde 1954, coordinó oficialmente el Cinema Club. Diez años más tarde, comenzó a promover sesiones en Cine Roxy. Su nombre está inscrito en las salas de proyección y en el Premio del Festival de Cine Santos – Curta Santos. Desde 2003, el festival Curta-Santos estimula nuevas producciones audiovisuales, centrándose en la producción local y la reafirmación de Santos como centro de las actividades audiovisuales. ¡Este festival revela talentos y alienta la creación de producciones locales pero también “educa” al público demasiado acostumbrado a los éxitos de taquilla estadounidenses!
Se han creado mecanismos que involucran la Cultura y la Educación para capacitar a un público consciente y crítico. Este es el caso del Instituto Quêro. Es una ONG que con el apoyo de UNICEF, utiliza el audiovisual como una herramienta para estimular el talento, promover la integración cultural, la transmisión de valores, desarrollar el espíritu empresarial y dar voz a los jóvenes que viven en situaciones sociales difíciles. Los jóvenes de 14 a 18 años pueden diseñar y crear sus propios proyectos dentro de un taller.
Para que la creatividad esté siempre presente, las universidades privadas de Unisanta, como Unimonte, permiten que sus estudiantes estar en contacto con una comunicación visual cada vez más completa. La creatividad fuera del aula y la interacción con la audiencia son parte del plan de estudios. Muchos estudiantes quieren completar su formación en el extranjero, especialmente en Europa, pero el punto esencial es su deseo de regresar a Brasil para abrir su propio estudio multimedia o de producción audiovisual. Una nueva generación está en camino gracias a los profesionales que ven el cine, la televisión y otros medios como otra forma de presentar a Brasil y colocarlo a la vanguardia de la escena audiovisual internacional. Muchos estudiantes de las dos universidades se han unido a uno de los estudios de animación más prometedores de la ciudad: el estudio Lightstar. El santista Marcelo de Moura, que ha trabajado en varios estudios europeos y estadounidenses, incluidos los estudios de Disney, creó su propio estudio de animación en 2004. El estudio ha participado en proyectos internacionales como «Astérix y los vikingos», «El secreto de Kell» y «Chico y Rita», los dos últimos con nominaciones al Oscar.
Muchas figuras locales están «luchando» para que el cine local recupere el impulso. El cine Roxy, una de las empresas brasileñas más tradicionales, con ocho décadas de explotación ininterrumpida, contribuye a la supervivencia del cine con un público santista que es el más fiel del país. Además Raquel Pellegrini, la Coordinadora de Cines Santos, jefa de Cine Arte Station 4, el Museo de Imagen y Sonido Santos (MISS) recupera material antiguo relacionado con la imagen y el sonido, así como registros y también imágenes. En el área Noroeste de la ciudad, la Sala Toninho Dantas, en honor a una de las figuras más importantes de Santos, lucha por la producción cultural en la región, y su cine comunitario con sesiones seguidas de debates, participa en la democratización del cine brasileño acercándolo a las poblaciones más sensibles.
El Ayuntamiento de Santos se ha hecho cargo de la Film Comission abandonada en los últimos años. La Santos Film Commission fue creada por el Concejo Municipal en octubre de 2007. La Santos Film Commission actúa como facilitador de las producciones audiovisuales realizadas en la ciudad. Uno de los objetivos principales de la Santos Film Commission es promover la implementación de obras audiovisuales en la ciudad, tales como largometrajes y cortometrajes, series, etc. Con sus recursos naturales, un centro histórico revitalizado, edificios de más de un siglo de antigüedad, Santos parece ser el lugar perfecto y está a solos 45 minutos de São Paulo. Según la Film Commission, la ciudad enumera 9 festivales de cine, el último de los cuales es el Festival de Cine de Santos Bandung, un festival entre dos ciudades creativas del cine de la Unesco; 380 compañías de películas; 1.350 empleos formales en la industria del cine y 5 colectivos de cine.
Parece importante pensar en las políticas culturales públicas asociadas con las políticas de educación pública; de lo contrario, las iniciativas quedarán vacías. Algunas iniciativas desaparecen debido a la falta de apoyo financiero logístico y / o público y / o privado, especialmente los ofrecidos a las poblaciones más desfavorecidas, a pesar de las leyes de incentivos existentes.
Una nueva esperanza puede estar en camino para la gente de Santos. De hecho, un proyecto de estudio está pensado. Diferentes ubicaciones, como la que se encuentra cerca del puerto podría permitir la revitalización y el contacto con una zona olvidada. La ocupación del mercado municipal con la EcoFabrica y VilaCriativa Mercado también pueden ser lugares estratégicos. De hecho, la EcoFabrica, que forma a carpinteros, ganó recientemente el Premio Internacional IF Social Impact Vila Criativa Mercado es un proyecto del Concejo Municipal que permite a personas con bajos recursos aprender un trabajo manual. La instalación de este futuro estudio de cine energizaría los vecindarios sensibles y valorizaría su población.
El establecimiento del Observatorio de Innovación Económica y el Parque Tecnológico de Santos son dos apuestas que la ciudad ha hecho para el futuro. La implementación del Observatorio de Innovación Económica evalúa los indicadores relacionados con el medio ambiente de la Ciudad para la innovación y los sectores creativos. Esto implica alrededor de veinte indicadores, como festivales culturales y / o economía creativa o empresas creativas formales. El parque tecnológico reúne a empresas, profesionales y académicos para promover la investigación a través de asociaciones e incentivos fiscales. La ciudad se compromete activamente a favor del cine para que sea un motor de la economía, 1 millón 527 mil 226 euros en los últimos 10 años, aunque quedan muchos esfuerzos por hacer.