Soy judía y budista, nací y crecí en el Perú. Tengo una mamá fantástica, que me transmitió el placer de cobijar y alimentar. Siempre hospedo a mis amigos y a los amigos de mis amigos y sobre todo, les doy de comer. No he tenido hijos, pero aun así soy una jewish mother; de ahí me viene la necesidad de alimentar a mis amigos, a quienes atiborro de comida.
Hay una riqueza atesorada en el Perú. Sus pobladores consumían alimentos con notables propiedades y crearon una cultura alimentaria. Cada vez más estudios científicos comprueban sus grandes beneficios en la salud, coincidiendo así con la sabiduría popular ancestral.
En palabras de Talia Schvartzman #EcoNutricion Talia Schvartzman (Facebook e Instagram), nutricionista que se ha sumado generosamente a este proyecto, “el Perú es una farmacia natural”.
El documental que estoy haciendo titulado Hatun Phajcha, Tierra Sana, busca valorar los conocimientos tradicionales sobre los alimentos y sus beneficios en dietas saludables. Las personas que apoyen con donaciones para la realización de este film, recibirán distintos premios a los que he puesto los nombres de algunos de estos grandiosos alimentos: la quinua, el pallar, el aguaymanto, la maca, el sacha inchi, el algarrobo, el cacao, la lúcuma, el yacón y el tarwi.
La Quinua, que está tan de moda, es un grano andino que disminuye el riesgo de contraer distintas enfermedades y sus nutrientes (minerales, vitaminas, ácidos grasos y antioxidantes) cumplen funciones neuronales.
De igual forma, de los Andes Peruanos es el Aguaymanto o Cuculí, una fruta exquisita que nos aporta gran cantidad de vitamina A y carotenoides, antioxidantes, evitando enfermedades crónicas y procesos de envejecimiento como el cáncer, especialmente de colon. ¿Cómo no consumirla?
El alimento más importante para la cultura Moche era el Pallar, en quechua es Pallani, que significa “recorrer el suelo” o “cosechar”. Es una leguminosa con un alto contenido de almidón y proteína. Además, contiene potasio, calcio, hierro, fósforo, manganeso y zinc. Un tesoro para la salud.
Y si hablamos de tesoros, no puede faltar la Maca, una de las primeras raíces que el poblador peruano consumió y hoy es un producto bandera del Perú. Durante la época incaica se convirtió en el alimento de los nobles y ofrenda a los dioses. Brinda un alto aporte energético; posee un gran contenido de calcio, fósforo, magnesio y potasio, por lo que se le considera energizante, vigorizante. Es conocida su función en la fertilidad tanto de la mujer como del hombre; es por eso que se le denomina el viagra peruano. Se usa en el tratamiento y prevención de osteoporosis, hipertensión y anemia.
Otro de los grandes alimentos nativos del Perú es la semilla del Sacha inchi, que contiene propiedades de reducción de colesterol LDL, aumento de colesterol HDL, desarrollo neuronal, óptimo desempeño intelectual, formación del tejido nervioso. También mantiene el metabolismo en equilibrio y es antioxidante.
El Algarrobo o guarango ha cumplido un rol simbólico central en las sociedades antiguas de la costa que rendían culto al agua y a la naturaleza; era un templo en sí mismo, pues convertía el desierto en oasis. Es apreciado como tonificante, proporcionando minerales como calcio y hierro, y vitaminas, especialmente del complejo B. Protege el sistema cardiovascular, reduce los niveles de azúcar en sangre, es antioxidante y optimiza el sistema inmunológico.
Ampliamente conocida es la maravillosa Lúcuma, con su textura y sabor tan particular, es una de las frutas con los más altos contenidos de proteína, carbohidratos, calorías, niacina y vitamina B6, por lo que se recomienda en la dieta de niños y adultos mayores. Ayuda a formar los neurotransmisores, hormonas sexuales, insulina, cortisona, tiroxina, favoreciendo así varias funciones del organismo, como son el buen funcionamiento del sistema nervioso y funciones endocrinas.
Un superalimento es el Yacón. Contiene gran cantidad de probióticos, importantes en la prevención y el tratamiento del estreñimiento. También previene la osteoporosis, disminuye el colesterol y los triglicéridos en la sangre, mejora la resistencia a la insulina, refuerza el sistema inmunológico y disminuye el riesgo de cáncer de colon.
El Tarwi es una semilla bendecida, ya que requiere poca agua y no necesita fertilizantes. Esta leguminosa ancestral tiene un alto contenido protéico y de grasa.
Y de la Amazonía tenemos al Cacao, que contiene fitosteroles encargados de bloquear la absorción de colesterol alimentario. Contiene también polifenoles, antioxidantes que previenen procesos ateroscleróticos y algunos tipos de cáncer.
Aquí pueden ver la campaña de Indiegogo para que conozcan más acerca de este proyecto documental y lo apoyen para que sea una realidad.
Photo Credits: Eduardo Zárate