¡Oh gran Sacerdotisa del Soul!
Sé que donde estas puedes ver y oírlo todo.
Nadie te hace el cuento
no permites los “te quiero”
hipocresía agotada
por los que intentan manipularlo a uno.
Estás al corriente de los atropellos
ultrajes de hombrecillos
queriendo una plataforma
fabricando historias que suenan mejor
al contarlas en voz alta
para endulzar a los que te embelesan
con promesas de reseñas
y antologías.
Nina el mundo no ha mejorado desde que estuviste.
Hoy te enjuician sin pruebas
solo con el canto de alguna sirena envilecida
por su fracaso.
Existen movimientos y causas
agrupaciones que marchan
sin destino
sin estar comprometidos.
Nina no hay bondad en las calles.
Los niños siguen siendo violados
secuestrados
en oferta al mejor postor
al que page la suma justa por su inocencia:
un millón por su litro de sangre.
Nina lo peor es que ya no podemos escapar.
Se acabaron las opciones de fuga.
Las caravanas gotean
los partidos políticos maniobran
radicalmente.
Se secan los ríos y se agota el pan.
Nina si puedes hacer algo desde tu altar:
logra conmover al sordo
haz que tu canción obligue a ser escuchada
convence al farsante de ser desenmascarado
erradica a los porristas de cualquier bando
controla las ínfulas de los poetas
expulsa a la izquierda oportunista al mismo cráter que a la derecha oportunista
elimina el hambre que incrementan los poderosos
trae esa luz que emana de tú interior
para alumbrar a los ciegos que siguen creyendo en falsos héroes.
Nina para mí solo te pido una gota de comprensión.