“(…) A la memoria de los nicaragüenses que en los últimos días han sido asesinados en las calles por reclamar justicia y democracia, y a los miles de jóvenes que siguen luchando, sin más armas que sus ideales, por que Nicaragua vuelva a ser República”.
Sergio Ramírez, Discurso Premio Cervantes, 2017
Nicaragua, país de lagos y volcanes, no sólo hermoso sino paradisíaco, fértil, rico en recursos naturales, ha conocido una historia azarosa. Tras la conquista española y el periodo colonial, formó parte del Primer Imperio Mejicano desde 1821 hasta 1838, año éste cuando se convirtió en una República. Entre otros hitos que han marcado su inestabilidad y precariedad en el siglo XX, cabe destacar la presencia americana (1912-1933), la desventurada guerra civil (1926-1927), la dictadura de Somoza (1936-1979), el periodo sandinista de ideología marxista, el conflicto prolongado con la Contra. Al fin, el 25 de febrero de 1990 el pueblo acudió a las urnas otorgando la victoria a la Unión Nacional Opositora (UNO), que derrotó por 14 puntos al Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN). Con posterioridad, se celebraron regularmente elecciones presidenciales, legislativas y municipales, que los observadores internacionales calificaron en todo caso como elecciones libres, justas y pacíficas, y llevaron al poder a Arnoldo Alemán en 1996 (Partido Liberal Constitucionalista, PLC), a Enrique Bolaños en 2001(PLC) y a Daniel Ortega en 2006 (FSLN), respectivamente. En esta década resultó una ardua tarea reconstruir la economía como consecuencia de los huracanes que asolaron la nación de forma reiterada: el huracán Mitch en 1998 y Félix en 2007. Desgraciadamente, diez años más tarde, el huracán Nate ha destruido gran parte de las infraestructuras rurales nicaragüenses.
Daniel Ortega fue el vencedor en las elecciones generales de 2011 y 2016 rodeado de acusaciones de fraude. Durante los años de su mandato, el país conoció la prosperidad económica, así como el éxito en el sector turístico al percibirse Nicaragua internacionalmente como un sistema político estable y seguro.
Los debates acerca del Canal ocuparon de nuevo el interés ciudadano a lo largo del año 2016 con motivo de los comicios presidenciales. El Canal de Nicaragua abriría una vía fluvial desde el Atlántico al Pacifico. Sin embargo, el proyecto encontró una fuerte oposición entre los nicaragüenses, a quienes no se les dio a conocer el contrato firmado por el Presidente Ortega y la empresa HKND; ni se les concedió la oportunidad de debatir públicamente el proyecto. Las críticas hacia la administración de Ortega se intensificaron en la primavera de 2018 (19 de abril de 2018) y apuntaron a asuntos relacionados con el proyecto de Canal -cancelado actualmente-, los incendios que arrasaron la reserva natural de Indio, la reforma del sistema de seguridad social. El gobierno respondió con ataques violentos y una durísima represión. Los estudiantes han abanderado las protestas en las ciudades y han contado con el apoyo campesino en las zonas rurales. Las organizaciones de derechos humanos cifran en más de tres centenares los muertos, cerca de 2.000 heridos y 226 presos políticos, desde que se iniciaran las actuaciones opresoras del gobierno.
La Comunidad internacional ha condenado gravemente estas acciones, propugnado el fin de la violencia y de la represión gubernamental. Así, la Organización de Estados Americanos (OEA) ha aprobado recientemente una resolución instando a la celebración de elecciones anticipadas.
Las respuestas de apoyo y solidaridad no se han hecho esperar allende las fronteras nicaragüenses. En Nueva York, la comunidad nicaragüense y los neoyorquinos de distintos orígenes y procedencias se han congregado en numerosos actos exigiendo el cese de la violencia y el respeto de los derechos humanos en una Nicaragua libre y democrática.
El pasado 4 de agosto tuvo lugar un recital lírico, a modo de “maratón”, en el centro cultural Barco de Papel, donde se reunieron poetas, artistas, escritores, periodistas, intelectuales… como Maria Palitachi, Linda Morales Caballero, Mar Russo, Yrene Santos, Mónica Sarmiento Castillo, Lea Díaz, Mercedes Gallego, quienes alzaron su voz con poesía creada para la ocasión apoyando al pueblo nicaragüense y el proceso de paz. Se sumaron muchos otros amigos y simpatizantes quienes también tomaron el micrófono y declamaron los versos de escritores nicaragüenses contemporáneos. La velada poética y reivindicativa concluyó entonando el Himno a la Alegría (Beethoven) entre vítores y abrazos: “¡Nicaragua libre!”
El 15 de agosto, en la plataforma cultural The Wild Project, sita en el corazón del East Village neoyorquino, se celebró el panel “The Nicaraguan Volcano”. Este evento, que incluía proyecciones audiovisuales y participación directa desde Nicaragua, pretendía concienciar del momento autoritario que atraviesa la nación. Contó con la presencia del historiador Dan La Both y de los periodistas Sayre Quevedo y Mercedes Gallego, quienes ofrecieron una aguda perspectiva de la situación nicaragüense. El líder de la coalición de estudiantes, Lesther Alemán, convertido hoy en Che Guevara de la revolución al increpar al Presidente Ortega por televisión, dirigió unas alentadoras palabras en livestream que aspiran al establecimiento de un diálogo nacional y a la apertura de negociaciones encaminadas a que el Presidente Ortega deje su mandato y se celebren elecciones.
¿Qué podemos hacer para promover la paz en Nicaragua? Ciudadanos del mundo, nosotros somos poderosos instrumentos de cambio. En primer lugar, es necesario dar a conocer, informar sobre la realidad tan cruda que vive el país, a través de charlas, debates y actividades similares. Una vez así, se hace indispensable la solidaridad que permita a los estudiantes continuar su resistencia contra el régimen autocrático. Se recomiendan algunas organizaciones fiables como Sor María Romero.
El insigne poeta nicaragüense Rubén Darío afirmaba que “si pequeña es la patria, uno grande la sueña”. Tenemos esperanza de que con el heroísmo del pueblo nicaragüense y los esfuerzos de la comunidad internacional Nicaragua emerja, se alce, no como patria pequeña, sino como patria grande y próspera.
NICARAGUA SE ALZA
“Se despereza el anhelo dorado
Al despuntar el alba
De una tierra espléndida de progreso y oportunidades
Que contempla el cielo compasivo y se eleva
Como un niño henchido de ilusión, obstinado
Que tropieza y se empeña en levantarse.
Esos bosques de pinos, cedros, caobas, quebrachos y guayacanes
Albergan Belleza, riqueza, prosperidad
Cual manantial de agua que no se agota
Y otorga vida y abundancia
Bosques que acogen las manos magulladas de los campesinos
Las voces de los estudiantes alentando un sueño, un ideal
El velo de las armas se desvanece
Se atisba el sesgo de miradas que imploran
Unión, perdón, reconciliación
Tras décadas de caminar a tientas/ a ciegas entre el estruendo de los fusiles,
La pólvora, la angustia, el dolor bermejo, sangriento
Los juguetes letales de acero duermen sepultados para siempre
En las ciudades y aldeas las gentes marchan
Por la senda de los héroes
Entonando cánticos sobre las palabras, el diálogo,
El sentido de Nación, el destino compartido…
Nicaragua se alza, renace, perdura”.
Lea Díaz, 4 agosto 2018, poema escrito para apoyar la causa de Nicaragua en el centro cultural Barco de Papel
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