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Lea Diaz
Photo Credits: Paul Sableman ©

La importancia de la política local

“Nadie nunca privará a los estadounidenses del derecho a voto, excepto ellos mismos, y la única manera que podrían hacer esto es no votando”.

Franklin D. Roosevelt

Al abordar cuestiones como los comicios o las campañas electorales, parece conveniente reconocer que 2016 ha sido un año crucial para la historia de Estados Unidos y, en general, para el orden mundial: las elecciones presidenciales se celebraron el 8 de noviembre de 2016 y han revestido consecuencias de gran magnitud no sólo en el territorio estadounidense, sino también en el conjunto de la sociedad internacional.

No ha transcurrido todavía un año desde esa fecha tan señalada y Nueva York ha sido protagonista de una nueva convocatoria electoral: las primarias, que tuvieron lugar el pasado 12 de septiembre. Bajo un día soleado de temperaturas más que agradables, los vecinos de los distintos barrios se dirigieron a las urnas para elegir candidatos a Alcalde, Presidente del Consejo de la Ciudad, Fiscal del Distrito de Brooklyn, entre otros. Los vencedores serán quienes concurran a las elecciones generales previstas para el martes 7 de noviembre.

¿Por qué la política local nos debe interesar?

Resulta paradójico que si bien los temas locales forman parte de nuestra vida y preocupaciones cotidianas, se suele prestar más atención a los asuntos de carácter nacional pues reciben éstos un notable seguimiento mediático. Sin embargo, es preciso subrayar que los representantes locales son los responsables de negociar y tomar decisiones acerca de cuestiones de tanto calado para los ciudadanos como la legislación, las políticas y los presupuestos regionales. Estas normas, políticas y presupuestos  afectan a la seguridad pública, la justicia penal, la reforma educativa, la sanidad, viviendas asequibles, los mayores, las ayudas sociales, los transportes, los parques y jardines, las diferencias raciales, la pequeña y mediana empresa, los derechos de la mujer, los discapacitados, los “sin techo”, cuestiones que tienen una incidencia directa y palpable sobre nuestro bienestar. En este sentido, conviene destacar que, en el marco del proceso legislativo, las leyes deben ser aprobadas por el Senado y el Parlamento de los Estados, respectivamente.

Bill de Blasio ha salido victorioso en las primarias del Partido demócrata (73.8%) frente a sus contrincantes Sal Albanese (15.8%) y Michael Tolkin (4.8%). No obstante, la participación ha sido muy baja: menos del 14% de los demócratas inscritos depositaron su voto el martes 12 de septiembre. La tasa de participación es preocupante y puede interpretarse como un signo de la apatía y desencanto del electorado con la situación política actual, también en el nivel federal.

Los cinco distritos de Nueva York han organizado un amplio catálogo de encuentros, asambleas, debates y actividades en las semanas precedentes a la votación, donde los neoyorquinos ha  tenido la oportunidad de conocer en persona a los candidatos y representantes, así como plantear cuestiones o intercambiar opiniones con aquéllos. La Junta sobre los Temas financieros de la Campaña en Nueva York (New York City Campaign Finance Board), desde su portal, https://www.nyccfb.info/nyc-votes/, ha promovido el compromiso cívico y los procesos electorales. Así, NYCVotes ha proporcionado información útil sobre cómo inscribirse, cómo ejercer el derecho al voto, el calendario electoral, la Guía del Votante, los debates entre los candidatos, programas comunitarios, programas juveniles, participación en la campaña…

En mi caso, he sido voluntaria desde el mes de junio de 2017 a favor de uno de los candidatos de mi distrito. Precisamente, el martes 12 de septiembre, día de las primarias, entablé conversación con una simpática mujer afro-americana de fuertes convicciones. Con voz serena pero contundente, Joanna insistió en la trascendencia del voto recordando cómo incluso el sufragio femenino se remontaba apenas algunas centurias (1890).

Votar no sólo constituye un derecho, sino un deber inexcusable de todo ciudadano, especialmente en estos tiempos convulsos en los que la socialdemocracia está siendo menoscabada mientras se propagan los extremismos y la intolerancia. Es preciso que nuestra voz se oiga. Debemos tener confianza en que la transformación y el cambio pueden y van a suceder; y un instrumento poderosísimo son las urnas. Aún queda por delante un mes hasta las elecciones generales del 7 de noviembre. Procuren participar, manténgase informados sobre todos esos aspectos esenciales para su comunidad, formen su propia postura al respecto. Y el día de las elecciones, ¡no se queden en casa!


Photo Credits: Paul Sableman ©

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