En el año 2007 nace la campaña “La hora del planeta” que es un gran movimiento global para enfrentar el cambio climático, creado por la organización WWF (World Wildlife Fund) éste impulsa a darle un respiro a la tierra por una hora apagando nuestras luces y nuestros aparatos eléctricos. Aunque lleva mas de 10 años, muchos desconocen de qué se trata o simplemente no les interesa desconectarse de sus vidas cotidiana por una hora; no obstante muchos países están adoptando este movimiento apagando sus monumentos y plazas, aun no es algo obligatorio hacia la ciudadanía y las empresas.
El pasado sábado 30 de marzo se celebró en todo el mundo la hora del planeta; aunque vi en redes sociales y noticieros de mi país que hablaban sobre este acontecimiento e impulsaban a la ciudadanía a contribuir, fue en vano. Durante esa hora salí a las calles a documentar para ver si la gente y locales comerciales tomaban conciencia sobre esta campaña y lo que me encontré fue decepcionante. En las tres cuadras recorridas vi lugares que normalmente están con las luces apagadas, con estas encendidas, sitios vacíos con luminarias y sin mencionar a la gran cantidad de personas sin ningún tipo de interés en unirse a la causa.
Lastimosamente, aun no estamos conscientes del gran daño que le estamos ocasionando a nuestro planeta y por desgracia, solo pasando una catástrofe despertaremos.