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Juan Eduardo Fernandez

¿Cómo escapar de la crisis?

Recuerda que iniciando el año le di algunas ideas en mi artículo ¿Cómo sobrevivir a la crisis en Venezuela? Sí, ¿lo recuerda? Pues olvide lo que le dije: acá le voy a dar algunas claves para que se escape, pues ya el plan para sobrevivir no tiene mucho sentido…

Primero que nada y para no desanimarlo, quiero explicarle, amigo lector, que “episodios” económicos difíciles como éste han ocurrido históricamente y que, a Dios gracias, se han solventado, y aquellos lugares donde otrora reinaba la inflación, la escasez y la corrupción hoy son sociedades que salieron de ese difícil trance y cuentan con una economía saludable. Ejemplo de ellos son: países de Europa del Este, Alemania en los últimos años de la Guerra Fría, Japón luego de la guerra, y así muchos otros.

Decía mi profesor Virgilio, que Hegel decía (yo cito a Virgilio, pues fue él quien me lo dijo a mí), que la historia era cíclica y se componía de tres períodos compuestos por tesis, antítesis y síntesis. A esto se le llama triada dialéctica. En cristiano: la historia se compone de hechos que devienen en contradicciones y al final llega un aprendizaje… o bueno algo así.

Explico lo de la triada dialéctica para asegurarles que este trance va a pasar, y seguro nos dejará muchas enseñanzas, para que ojalá muchos de los errores no se repitan. Pero si usted no tiene paciencia acá les dejo algunas ideas para escapar de la crisis (es decir, del país):

– Si usted es de esas personas que pudo ahorrar algo en moneda dura, compre un pasaje y visite a algún familiar que tenga fuera. Dígale a su familiar (y eso es imperativo), que solo va por unos días. Una vez instalado en su sofá, haga una toma pacífica y no regrese nunca. Seguramente él le dirá que lo va a acusar con la migra si no se marcha, pero no lo hará, pues de hacerlo a él también lo deportarán.

– Otra opción es googlear el término “esposas rusas o afganas”. Allí encontrará varios sitios donde podrá conseguir una novia virtual a la que tendrá que conquistar, para que finalmente (y como premio a la constancia), ella se case con usted y se lo lleve. Nota: no todas las rusas son como Kournikova y Sharapova, pero no se preocupe pues seguramente usted tampoco sea un galán de cine.

– Cruzar a pie a Guyana (Colombia está descartada porque la frontera está cerrada y a Brasil ni hablar, allá está también por reventar un pe… digo, un problema). Advertencia: una vez allá puede que lo acusen de espionaje o algo peor, pero seguramente en la cárcel tendrá las tres comidas y sin hacer cola.

– Si usted sabe nadar, siempre tendrá la opción de las Antillas pero, para ir más seguro, podría tomar un avión de Cubana hasta la Habana. Se recomienda usar una bata blanca para que se confunda usted entre los médicos cubanos que están regresando.

Pero ojo: sea cual sea el plan para escapar de la crisis (si es que usted quiere hacerlo), nunca, pero nunca opte por hacer una balsa con una tripa de caucho, pues, con lo que le cuesta la tripa de caucho y todos los materiales para su construcción, le resultará mejor comprar un pasaje de avión.

Y para los que nos quedamos, no se preocupe, y en esos momentos de flaqueza e incertidumbre, acuérdese de Carlos Baute, quien dijo que nunca si iría…


Photo Credits: vinka bravo

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