Somos una revista independiente que sobrevive gracias a tu apoyo. ¿Quieres ser parte de este proyecto? ¡Bríndanos un café al mes!

Me enamoré de tu iPod

En Nick and Norah’s Infinite Playlist, Norah le dice a Nick que es su alma gemela musical porque tienen los mismos gustos (excepto por The Cure), y la búsqueda de Where’s Fluffly termina en una linda sorpresa.

Ahora, ¿por qué la música nos conecta? ¿Por qué un grupo en específico definirá si vamos a ser amigos o no? ¿Por qué si alguien compartió música contigo siempre te acuerdas de ella cuando la oyes? ¿Por qué la música define cómo actuamos? Recuerdo haber pasado tres semanas sin tocar mi iPod después de terminar con mi novio porque teníamos los mismos gustos en música. Su música era mía también y no lo sabía manejar.

Hay algo lindo en tener eso especial que te regrese a un momento en donde explotabas de la felicidad porque no hay otro lugar en el que quieras estar cuando oyes Frank Sinatra o “Happy” de Pharrell, o quizá estar feliz y ya cuando tu iPod pone la canción que tu mejor amigo y tú siempre cantan cuando están en su carro, o reírte descontroladamente cuando “She’s So High” de Tal Bachman porque tienes el recuerdo más feliz de tu hermanita y tú cantándola a todo volumen en ropa interior.

La música hace que los recuerdos signifiquen algo más. Incluso, la música puede ser un antecedente a un recuerdo. A veces tengo una canción que quisiera oír en un momento específico y cuando logro que todo cuadre es mejor de lo que me imaginé. Mis amigos y yo teníamos un juego que era poner el iPod en aleatorio y hacer escenas de películas para cada canción. ¿El resultado? Phil Collins debería estar en el soundtrack de todas las películas.

Sin embargo, hay algo dentro de la música que es más personal que la música en sí, y esas son las playlists. Por mi experiencia les puedo decir que son un pedacito de la mente de alguien, y eso lo aprendí hace cuatro años cuando una de mis mejores amigas y yo nos empezamos a hacer CDs de regalo de cumpleaños. ¿Cómo decides cuál canción compartir? ¿Cuál es el poder místico que tiene una playlist perfecta para llevarte a otro lugar? No importa si es Kanye o Milky Chance; las playlists tienen poderes mágicos y deben ser tratadas con cuidado.

Es verdad. Hay gente que no lo entiende y no vale la pena explicarlo. ¿Por qué debería explicar toooda la historia de por qué The Fray es estar en bachillerato? ¿Por qué el soundtrack de Frozen es estudiar sobre conflictos étnicos? ¿Por qué no puedes oír esa canción de Bob Schneider? La música forma una parte tan activa de nuestras vidas que si quisiéramos hacer una línea del tiempo de nuestras vidas solo con la música que oíamos en el momento todo cuadraría perfecto. Diría, por ejemplo, que descubrí a Los Beatles en octavo grado y que cambió mi vida para siempre. También definió que a las personas que no les gustan Los Beatles no vale la pena tratarlas porque tienen problemas mentales.

Nick and Norah definen perfectamente lo que la música le hace a las personas (y además tiene un soundtrack buenísimo) pero la mejor parte sobre la música es esta:

Thom: You just haven’t figured it out yet, have you.

Nick: What?

Thom: …The big picture!

Nick: I guess not.

Thom: The Beatles.

Nick: What about them?

Thom: This. [grabs Nick’s hand]

Thom: Look, other bands, they want to make it about sex or pain, but you know, The Beatles, they had it all figured out, okay? «I Want to Hold Your Hand.» The first single. It’s effing brilliant, right?… That’s what everybody wants, Nicky. They don’t want a twenty-four-hour hump sesh, they don’t want to be married to you for a hundred years. They just want to hold your hand.

Hey you,
¿nos brindas un café?