En tiempos turbulentos en los que los derechos de las mujeres están casi en una cuerda floja, es refrescante encontrarse frente a bandas femeninas que se rebelan, que no se disculpan por nada, son descaradas e increíblemente talentosas. La energía en el escenario es electrizante. La atmósfera es casi una fuerza natural que te golpea en el rostro y no te permite desviar tu atención. Artistas locales como Flight of Fire, Carissa Johnson, Viva Gina y Unstraight, en la escena de Boston, se levantan por la igualdad, aceptación y reconocimiento.
Aquí estamos.