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Consejos para iniciarse en el fascinante mundo de “El Bachaqueo”

CARACAS: Antes de comenzar quisiera aclarar para los lectores que no son venezolanos (pues los venezolanos sí que lo tenemos claro) cual es el significado del término «Bachaqueo».

Bachaqueo viene del verbo bachaquerar y es la acción de ir mercado por mercado y/o abasto por abasto y/o buhonero por buhonero, con el único fin de obtener comida, desodorante o cualquier producto que debido a la escasez (ya sea por ineficiencia o por guerra económica, da igual) usted no encuentra en ninguna parte.

Aclarado este punto, ahora paso a ofrecerle algunos consejos que le ayudarán a la hora de emprender esta increíble aventura, ya sea por necesidad o por placer (esto es en serio, aunque no lo crea, hay gente a quien le da placer bachaquerar).

Pero no crea que el Bachaqueo es fácil, esta es una actividad que requiere de inteligencia, paciencia, resistencia física y otras habilidades que irá desarrollando con el paso del tiempo. Paso entonces a la explicación:

Inteligencia
Un buen bachaquero debe dominar a la perfección el chino, o por lo menos conocer algunas frases, pues, el asiático que administra el abasto más cercano a su domicilio será su principal aliado. ¿Cómo? Usted le preguntara en su idioma nativo (no en el suyo sino en el de él) si va a llegar algún producto. Ejemplo: 中國紙呢?que quiere decir: ¿Chino hay papel?

O si por ejemplo justo cuando usted está llegando se arma un tumulto en la cola, entonces debe gritarle al chinito: 中國人,不要忘了我 que quiere decir: «Chino sálvame, no me dejes morir». Esto con el fin de que le guarde el producto deseado no vaya a ser que, cuando le corresponda su turno (el suyo, no el del chino) ya se ha acabado el producto.

Paciencia
El buen bachaquero sabe que esta actividad demanda de mucho tiempo y es que, al fin y al cabo, un paquete de Harina Pan, un desodorante y hasta el preciado papel son importantes… Aquí en Venezuela se cumple al pie de la letra aquello de «No sólo de pan vive el hombre», también vive de latas de atún, arroz, frijoles y cualquier alimento que se tenga la dicha de encontrar. Pero para ello se deben visitar al menos 4 mercados distintos y hacer colas de varias horas.

Pero no solo la paciencia es necesaria, es bueno dominar también la meditación y el autocontrol. Pero ¿para qué? Para cuando el militar que cuida la cola comience a gritarle y a mandarlo a mover de un lado a otro. La cosa funciona así: si usted hace la cola en un lugar donde hay sombra, el militar comenzará a moverlo para donde hay sol, pero no lo hará amablemente pues casi siempre, al individuo le hicieron bullying en el cuartel y se siente con la autoridad para desquitarse con los civiles. En estos casos lo mejor es moverse para donde le diga, acompañando la acción con una gran sonrisa y el acostumbrado “si señor”.

Otro buen dato es hacerse amigos de la tercera edad, por lo menos de 5, eso sí, que cada uno de ellos tenga un terminal de cédula de identidad distinto. Así, con la excusa de que lo está acompañando, podrá comprar cualquier día de la semana y sin hacer tanta cola.

Y finalmente un buen bachaquero debe hacer del ayuno su filosofía de vida, no solo porque mientras esté haciendo cola durante horas le va a dar mucha hambre (y no podrá comer porque no hay), sino porque probablemente después de mucho esperar no consiga comprar nada y deba volver a casa con la bolsa vacía.


Photo credits: ruurmo

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