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Alejandro Ceballo

Alejandro Ceballos: una vida entre hilos, telas y colores

NUEVA YORK: Lo primero que recordamos tras un viaje en Guatemala, es la profusión de colores que vemos esparcidos en cuanto traje, tela, blusa, y manteles adornan negocios, vitrinas y personas. No solamente en Guatemala sino también en toda tienda que venda artesanía del país centroamericano. Con una destreza aprendida en tiempos de la colonia, cuando los colores de sus trajes eran lo que diferenciaba a unos esclavos de otros, permitiendo a los dueños distinguir los propios de los ajenos, los guatemaltecos han ido afinando unos conocimientos aprendidos con dolor y los han transformado en un oficio con múltiples posibilidades de trabajo, un trabajo digno y bien remunerado.

La industria de vestuario y textiles que reúne a empresas que elaboran hilos, telas, confecciones y accesorios representa actualmente uno de los componentes más importantes del Producto Interno Bruto y es uno de los sectores que genera mayor cantidad de empleos directos e indirectos.

– La industria de vestuarios y textiles representa el 8 por ciento del PIB de Guatemala y calculamos que da empleo a unas 100mil personas – precisa Alejandro Ceballos, presidente por cuarta vez consecutiva de la asociación Vestex, la que reúne a todas las empresas de estos sectores en Guatemala. Ceballos acompañó a una comitiva encabezada por el Ministro de Economía Rubén Estuardo Morales Monroy del país centroamericano, para realizar encuentros y reuniones dirigidos a impulsar aún más este sector tan importante para su país.

– Estuvimos en Washington donde nos reunimos con senadores, con el departamento de comercio y aduanas. Estamos analizando con atención las consecuencias que pueda tener para Centroamérica el TLC (Tratado de libre comercio) con Vietnam, país que representa un competidor para nuestras empresas. Si Vietnam baja su estándar y empieza a trabajar con empresas subsidiadas obligará a los empresarios centroamericanos a bajarlos también con repercusiones negativas para las condiciones laborales de nuestro personal, que al momento son muy buenas.

 

¿Y existe el peligro real de que Vietnam se transforme en un competidor tan fuerte que obligue las empresas centroamericanas a bajar sus estándares?

Sinceramente no lo creo. Entre las condiciones que pone el TLC está la que impide trabajar con telas importadas de China y la mayoría de las telas que ellos usan vienen de ese mercado. Tampoco están permitidas las empresas mixtas, mitad estatales y mitad privadas, y casi todas tienen esa característica. Otro factor importante que nos favorece es la cercanía con Estados Unidos. El mercado ha evolucionado mucho y pide una respuesta rápida, nosotros podemos ofrecerla pero para los productos que vienen de Asia los tiempos son mucho más lentos.

En consideración de esas razones creo que serán pocas las empresas vietnamitas del sector textil que se beneficiarán del TLC.

 

Alejandro Ceballos ha transcurrido una vida entera entre hilos, telas y patrones, su primer trabajo lo desarrolló en una textilera que se dedicaba a hacer hilos y a venderlos a la industria artesanal.

 

Era una empresa textil de larga trayectoria, tenía 130 años de vida. Unos amigos de infancia eran los gerentes y me ofrecieron el trabajo. Allí me quedé 25 años y a lo largo de ese tiempo fuimos desarrollándonos e hicimos también telas y confecciones. Al final vendíamos el paquete completo. Fuimos los primeros. Hoy lo hacen casi todas las empresas. En esos años pude conocer a fondo toda la industria y me dediqué a mejorarla como Presidente de Vestex.

 

Ceballos dirige actualmente su propia empresa y se mueve en Estados Unidos con la misma soltura con la que se maneja en su país porque sus conocimientos en la materia son tan profundos que sabe muy bien lo que se necesita para seguir creciendo.

Muchas las batallas que ha tenido que enfrentar a lo largo de estos años, entre ellas lograr que las empresas guatemaltecas trabajaran como cluster para ser más competitivas y poder ofrecer el producto completo así como lo requería el mercado internacional.

Este año también resolvieron el problema de la aprobación de la norma de reforma de la ley de Maquila y de Zonas Francas así como se lo pedía la Organización Mundial del Comercio (OMS) para asegurar una competencia igualitaria con los otros países.

 

¿Cuáles serán las repercusiones de esa ley?

Guatemala es un país con una renta per capita superior a un dólar, al contrario de otros países de Centroamérica como Honduras y Nicaragua. Por esa razón la OMS nos obligó a aprobar una ley que evitara el subsidio a las exportaciones. Nos dieron un plazo de quince años, y ya lo habíamos superado. Era necesario cumplir con ese mandato y no fue fácil lograr una ley justa, que nos permitiera cumplir con los requerimientos de la OMS sin perder competitividad, pero al final lo hicimos. Gracias a esa ley se ha esclarecido el panorama para la empresa textil y eso nos permitirá consolidarnos y crecer ulteriormente en los próximos meses.

 

¿Cuáles son los mercados de exportación más importantes para la industria del textil de Guatemala?

Nuestras exportaciones se dirigen en un 70 por ciento al mercado de Estados Unidos y en un 30 por ciento al de los países centroamericanos y del Caribe. Trabajamos en contacto con la asociación de textileros norteamericanos ya que somos el mercado que importa sus hilados de algodón y sintético, los transforma y los vuelve a exportar.

 

¿Y cuál es el rol de los coreanos?

Los coreanos tienen importantes inversiones en nuestro país. Ellos importan mucha tela de Asia y la fabrican en Guatemala.

 

¿Cuáles son los problemas internos que debe enfrentar como presidente de Vestex para dar respuestas adecuadas a las necesidades de los empresarios?

Nuestra industria está muy consolidada, estábamos en espera de la nueva ley y ya dimos también ese paso. A veces tenemos problemas con la burocracia estatal que, como en todos países, es lenta, pero en general el sector camina bien y los gobiernos, conscientes de que somos una importante fuente de ingreso y de trabajo, tratan de ayudarnos.

 

¿Entre sus clientes están también algunos estilistas?

Sí, hay tiendas exclusivas que hacen pedidos específicos para un número limitado de prendas. Nosotros podemos garantizar un producto terminado y de alta calidad gracias a los cluster que nos permiten desarrollar las telas, los patrones, todo. Lo único que nos llega de Estados Unidos son los diseños porque allí está el centro de la moda y están al tanto de las nuevas tendencias. Ellos nos envían las colecciones dibujadas y nosotros las realizamos.

¿En cuáles áreas de Estados Unidos exportan mayoritariamente?

En Los Angeles por el componente coreano que tiene muchas de sus agencias en esa ciudad y en Carolina, del norte y del Sur.

 

Alejandro Ceballos habla con el conocimiento y la pasión de quien no solamente dedica su vida a un trabajo sino que encuentra en él su realización personal y profesional. Cree profundamente en las potencialidades de la empresa del textil en su país, le enorgullece la capacidad profesional de todo el que allí trabaja y aprecia la larga tradición de un oficio que es sinónimo de patrimonio cultural y cuyos secretos remontan a una herencia artesanal.


Photo Credits: chany crystal

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