Somos una revista independiente que sobrevive gracias a tu apoyo. ¿Quieres ser parte de este proyecto? ¡Bríndanos un café al mes!
willy wong
Photo Credits: Nisa yeh ©

Adiós en solitario

Una bala incandescente auto dirigida a la máquina de sus discursos y estrategias, le abrió las puertas para adentrarse en el espectro que pocos esperan sin temor y que muchos evaden, innecesariamente, con fervor. Revólver en mano –una que no sabemos si se topó con el desánimo o el nerviosismo en algún oscuro segundo– tiró del gatillo para agrandar aún más la línea divisoria de las sociedades multiculturales. Penosa determinación que en su momento avivó las semblanzas y los escarnios, pero que realmente hará sentir la trágica potencia del acto en el transcurso del tiempo, de ese que con el recuerdo y el rencor agrandará la latente, lasciva y morbosa polarización que vive el Perú. Porque su muerte no es solo suya, de su cuerpo, de sus pensamientos. Su deceso es también de aquellos, de los que en reverencia doctrinaria lo amaban y siguen amando, de esos que comparten su sangre e ideología; así como, paradójicamente, de quienes lo odiaron y que con su inmediato fallecimiento sintieron haber enterrado años de dolor y encono.

Porque su adiós en solitario, repentino e indescifrable tampoco ha marcado el fin de una existencia perturbada por el poder, los avances y los errores. Por el contrario, su pase hacia lo desconocido ha legitimado el renacimiento de un legado que busca, desde ya, fortalecer y enraizar la oposición militante. Un frente que batallará, al igual que otros movimientos inconformes, de manera invisible y silenciosa, con consigna retadora e inmortal, si no se edifica el puente del entendimiento para que transcurra la ansiada reconciliación nacional. La añorada concordia peruana que a gritos buscan nuestros sentidos patrios para dar fin a la paralizante inmoralidad, a los asfixiantes sentimientos que, inverosímilmente, pedían corroborar el cuerpo en el ataúd. Que en paz descansen los que se fueron por decisión propia, los que brindaron una respuesta insólita a los cuestionamientos y la táctica adversaria, los que a su madre tuvieron que dejar en tierra.


Photo Credits: Nisa yeh ©

Hey you,
¿nos brindas un café?