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Chris Cabrera

ABSOLUT BK: Flashback #8

L train: Al mediodía de un día miércoles, el último miércoles de noviembre debo agregar, sentados con nuestro equipaje entre las piernas para que no ocupen más espacio del debido o rueden en cada frenada del tren, nos mirábamos los unos a los otros. Todos éramos sospechosos. El silencio reinaba en el vagón del tren. Un hombre hacía malabares con un bagel, su café y su equipaje, sonreía tímidamente ante su evidente torpeza. Yo miraba a todos los pasajeros del tren acoplados en una tensa calma.

Se abrían las puertas en cada estación y cada uno examinaba minuciosamente a los nuevos pasajeros que entraban. Si llevaban equipaje, niños, si iban en grupo, la forma en que vestían, raza, movimientos. Hacíamos contacto visual y el silencio se mantenía. Al llegar a Union Square el tren se desahoga, quedamos unos cuantos pasajeros con nuestro equipaje aparentemente más relajados. Nos quedan solo dos estaciones para la conexión, hemos superado una de las etapas de nuestro viaje enteros y paranoides.

Llegamos a Penn Station, nos da la bienvenida el Army, NYPD y quién sabe cuanto paco undercover (paco es un slang Venezolano que hace referencia a los policías aka brujas, etc), y el olor a pan recién salido del honor de las bakeries que ahí se encuentran. Llenándose de pasajeros rápidamente, desfilaban las armas alrededor listas para defendernos de cualquier amenaza.

La seguridad siempre aumenta en estas fechas, sin embargo ver este tipo de arma de guerra sostenida por un G.I. Joe no me hace sentir segura. Me hace pensar que algo no está del todo bien.

En las últimas semanas vivir en New York se ha convertido en un perpetuo ejercicio de vigilancia, “If you see something, say something”. Me he fijado que las personas están más atentas de sus alrededores. En las conversaciones de estos días siempre ha estado presente el tema del terrorismo y el de los ataques masivos. La gente está teniendo pesadillas, la gente se está educando de cómo actuar si desgraciadamente les toca estar en el momento y el lugar equivocado. Los artículos más vendidos en este Black Friday fueron armas de fuego y hoy justamente atacan a un centro de discapacitados en California.

El terror y la amenaza existen. Todos somos sospechosos. En el L train ha nacido la paranoia, so don’t forget, If you see something, say something.


Photo Credits: KIDKUTSMEDIA

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