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Reino de Tonga

Aunque el archipiélago polinesio Tonga posea un total de ciento setenta y siete islas, solo treinta y seis tienen habitantes. Son hijos de los lapitas, un pueblo de pescadores y alfareros que se expandió por la Oceanía Cercana en el neolítico. Con el tiempo se convirtió en el Imperio Tu’i Tonga. Como cualquier imperio creció por vía de la conquista, fue decayendo en guerras internas, tuvo a sus calígulas y nerones como Havea I y Takalau, sus magnicidios, los monumentos como la puerta de piedra en Ha’amonga y la perdida de la colonia de Samoa. Fue protectorado británico, pero nunca abandonó su monarquía nativa y, de hecho, no se convirtió al sistema parlamentario hasta después de los disturbios de 2006.  

Este preámbulo no fue solo un acoplamiento a las leyes introductorias de la oratoria, sino que creo necesario tener un respetuoso conocimiento de causa antes de dirigirse a la desdicha ajena y no tan ajena. Tonga, como mi país Costa Rica, no es uno de los protagonistas de las geografía mundial y apuesto que son pocos los que puedan nombrar su capital, Nukualofa.

El 15 de enero, mientras se estrenaba el año, una explosión enorme fue escuchada hasta en Nueva Zelanda y Alaska, comparable solo al desastre del Krakatoa y cambió la vida de este país insular. Muchos describieron ruidos previos como cañones, y el mayor como el sonido más fuerte que hayan experimentado. Los satélites y las estaciones nucleares captaron una magnitud de la que, hasta ahora, no se tenía registros. Las imágenes que se repetían en televisión mostraban el humo negro remplazando el azul marítimo como en las películas de asteroides. 

No podemos comparar el hongo que se formó sobre el volcán submarino con las detonaciones nucleares. La explosión de principio humano más grande, la bomba del Zar, se midió en un 0,7 hectopascales (unidad de presión) mientras en Tonga se registraron 2 hectopascales. La onda expansiva circuló varias veces la circunferencia terrestre. Con estos cálculos se puede estimar que tanto la bomba del Zar como Tonga tuvieron  una fuerza quince megatones, pero la onda expansiva del segundo fue más poderosa. 

Ambas islas (desiertas) al lado del volcán desaparecieron de la faz de la tierra y los lugares habitados recibieron un tsunami. Al ser de relieve plano, los habitantes debieron refugiarse en los techos como si fueran colinas. Más de ochenta mil afectados se encontraron incomunicados porque hasta las conexiones a Internet se perdieron y la columna de treinta kilómetros de altura generó una medianoche artificial. Lo más preocupante es que las cenizas y la lluvia sulfúrica contaminaron las reservas de agua potable.  

El Krakatoa, un cataclismo similar, tuvo dos efectos al estilo no hay mal que por bien no venga. Primero, las temperaturas globales descendieron, inclusive se registran años en que no hubo veranos. Segundo, unos magníficos atardecer y las partículas, con ciertos efectos de refracción, causaron noches con una luna azul-verde. El poeta victoriano Alfred Tennyson describió estos ocasos como blood-red eve, the wrathful sunset glared. 

Sin embargo, esta nube de ceniza que se estima entre treinta a treinta y nueve kilómetros de altura, parece no traernos beneficios. A pesar de su tamaño, el volumen no es suficiente y lo mismo ocurre con las cuatrocientos mil toneladas de dióxido de azufre, un gas que en mayores cantidades podría enfriar la atmósfera. Este azufre solo irritará vías respiratorias y producirá lluvias ácidas que afectarán, probablemente, cosechas, como un mal que por mal viene.  

Las estaciones meteorológicas europeas registraron variaciones impresionantes en la presión atmosférica quince horas después. Los sismógrafos en Costa Rica percibieron la onda expansiva también y, aunque no hubo tsunami, si se desalojaron las playas por corrientes y mareas anómalas. El tsunami se expandió por el Pacífico, causó inundaciones menores en California y Japón, dos muertes en Perú, además de daños a puertos y embarcaciones. El mundo sí es un pañuelo y hasta una comisura puede destejer el Cinturón de Fuego.  

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