Somos una revista independiente que sobrevive gracias a tu apoyo. ¿Quieres ser parte de este proyecto? ¡Bríndanos un café al mes!

Microbiota y Metabolismo

¡Dentro del aparato digestivo tenemos un zoológico! Una gran cantidad de bacterias que comúnmente llaman flora intestinal, científicamente conocida como Microbiota. Las investigaciones más recientes han relacionado el desequilibrio entre las bacterias buenas y las malas con trastornos como: artritis, síndrome de intestino irritable o colitis, dolores de cabeza, obesidad, cáncer y depresión. La edad, la genética, el medio ambiente y el estilo de vida afectan las bacterias que componen el microbioma. La alimentación industrializada, el estilo de vida, el estreñimiento, el tabaquismo, el beber en exceso y la falta de ejercicio, afectan el funcionamiento de todos los sistemas del cuerpo. En cambio, los cereales integrales, los cultivos activos como los yogur, los probióticos y las bacterias vivas de los alimentos fermentados fortalecen el sistema inmune, de manera que incrementan la cantidad de anticuerpos que luchan contra las enfermedades y las inflamaciones.

La alimentación con fibra suministra hidratos de carbono complejos que el intestino no puede digerir y que aprovechan las bacterias. La microbiota intestinal tiene enzimas que transforman los polisacáridos complejos de la dieta en monosacáridos y ácidos grasos de cadena corta que son transportados al hígado y utilizados en la síntesis de las grasas.

Se ha descubierto una microbiota humana de “tipo obeso”, asociada al exceso de peso y al síndrome metabólico que depende del componente microbiano. La microbiota humana se crea en el momento de nacimiento, el feto dentro del útero se encuentra en un medio estéril, en el trabajo de parto cuando pasa a través del canal, se expone a los microbios presentes en el entorno, que, desde ese momento permanecerán como defensas.

Los bebés que nacen por cesárea tienen una flora intestinal diferente y quedan expuestos a contraer enfermedades y padecer sobrepeso. Otro problema es la inmadurez del esfínter gastroesofágico: la mayoría de los bebes actualmente, padecen reflujo.

Los trastornos digestivos son uno de los grandes problemas del siglo 21, las emociones y la ansiedad, repercuten en la digestión. Los fármacos, la diabetes y los antibióticos, atacan las bacterias buenas y estas se vuelven patógenas como, el Helicobacter Pylori, y hongos como la candida o monilia, contra la cual batallan los diabéticos, además de causar trastornos como la intolerancia a ciertos alimentos.

Es importante mantener la homeostasis metabólica y el sistema inmune. La alteración de la flora intestinal en los países industrializados explica las epidemias actuales de la humanidad: la obesidad, la diabetes, el hígado graso, la enfermedad celiáca, la colitis el asma, la depresión y el cáncer. El pez por su boca muere, la industrialización causa enfermedades incapacitantes con gran costo emocional y económico.

Resulta relevante el Premio Nobel de medicina otorgado a los investigadores James Allison y Tasuku Honjo quienes fueron premiados por estudiar la biología de los Linfocitos T, células que nos protegen de muchas enfermedades, incluido el cáncer. La investigación cambia el paradigma: por más de 100 años los tratamientos han suprimido al sistema inmune en la lucha contra el cáncer y en las infecciones de la piel. La quimioterapia destruye el sistema inmunológico y hace más daño que el cáncer por sí mismo. Las enseñanzas de Hipócrates siguen vigentes: “que tu medicina sea tu alimento y tu alimento sea tu medicina”.

Hey you,
¿nos brindas un café?