El 23 de abril se celebró el Día Mundial del libro. La industria editorial está en peligro de extinción desde que apareció el internet, pero los “rucos”, no vamos a dejar que se extinga. ¡Tenemos que seguir comprando libros!
Estudios científicos han encontrado muchas bondades al hábito de la lectura, que incluso aleja las enfermedades. La lectura se encuentra enmarcada dentro de las funciones secundarias del lenguaje. La principal es comunicar o transmitir información, pero tiene también otras funciones: informativa, representativa, expresiva, imaginativa, creativa y ortográfica. La lectura es fuente principal de información, la eficacia de la lectura se relaciona directamente con el rendimiento escolar; una correcta comprensión permite solucionar eficazmente los problemas matemáticos.
En la función representativa o cognitiva, el lenguaje aparece como símbolo, predomina en los textos informativos y descriptivos en los que el autor quiere comunicar algo objetivamente; es la función más relevante de la lectura.
En la expresiva se incluye la poética, estética y la emotiva a través de las cuales la lectura produce emociones e imágenes en el lector.
En la imaginativa y creativa, es notoria la capacidad de estimular la conectividad de ambos hemisferios del cerebro y las emociones del lector mientras que la ortográfica, incrementa el vocabulario y mejora el lenguaje.
Además de todo esto la lectura tiene beneficios en la salud. Leer unos veinte minutos diariamente pone en acción las redes neuronales en el cerebro, mantiene activas las funciones cognitivas profundas. La lectura, la buena actitud y el ejercicio físico, alejan las enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y la demencia senil. El estudio no encontró evidencia similar entre quienes leen revistas o periódicos, la razón es que los libros despiertan funciones cognitivas más profundas que la lectura de artículos.
Leer relaja, reduce el estrés; enfocarse en otro tema fuera de los problemas es como escapar de un cerebro saturado. Acompaña la lectura con una taza de té para dormir relajado. Si se acostumbran a leer antes de dormir, el cerebro reconoce los patrones de conducta, de manera que el cuerpo se prepara para un sueño reparador. La lectura los mantiene conectados, ayuda a crear relaciones de amistad, les ofrece temas para compartir y como un plus pueden hacer labor social fomentando la lectura.
La salud está muy conectada a la actividad mental. Cuando se mantiene el hábito de la lectura, pueden descubrir otros mundos, no necesitan dinero ni pasaporte para viajar, la imaginación es el límite. La escritura es parte importante de la cultura y la historia de la civilización, el internet es una herramienta indispensable, ambos pueden convivir perfectamente con la tecnología.