Roosh V es un pickup artist (sí, aparentemente, eso existe en la vida real), pero no crean que es uno chévere como Hitch, no… En una de las últimas entradas de su blog, habla muy a la ligera de cómo las mujeres deberían ser privadas de su libertad. Eso es a lo que en mi país le llaman “mear fuera del perol”. En este caso, el perol está aquí y ahora, en la civilización occidental, pero Roosh V claramente está en otra parte. Incluso me pregunto si la razón por la que está promoviendo todo este ideario sociopático es para ganar popularidad. Es decir, ¿cómo podría un hombre nacido y criado en los Estados Unidos, realmente estar soñando con sociedades islamistas? ¿Por qué no se muda para allá, entonces? Ah, cierto, porque allá no podría ser un pickup artist.
Querido Roosh,
En una entrada reciente, te pones nostálgico sobre aquellos tiempos en los que a la mujer “no se le permitía estudiar cualquier tema trivial que quisiera, acostarse con cualquier hombre que le gustara, o desarraigarse y viajar el mundo porque quería ‘encontrarse a sí misma’”. Sin embargo, un hombre como tú puede vivir del trivial asunto que es conquistar mujeres, acostarse con gente a la que ni siquiera respeta, y viajar el mundo no para encontrarse a sí mismo, sino para escribir libros acerca de cómo cogerse a las mujeres según sus nacionalidades. Con todo y eso, no pienso que sería justo privarte de tu derecho de vivir una vida patéticamente superficial. Porque esa es tu decisión. También dices que nosotras competimos contra los hombres en el mercado laboral por “envidia de pene”, así que, básicamente, tienes el mismo nivel argumentativo que un niño de segundo grado.
Luego, cuando tratas de sustentar tu muy perturbadora visión del mundo, citas a Schopenhauer, quien sencillamente es uno de los filósofos más despectivos en cuanto al ser humano se refiere, con opiniones realmente cuestionables en el tema de la pederastia, ideas plenamente misóginas, y la creencia de que toda actividad sexual debería limitarse solo a la reproducción. Así que solo se trata de ti, un blogger misógino, citando a un filósofo misógino. Sin hechos.
Hablas de nuestras capacidades intelectuales según nuestro género, afirmando que las mujeres son naturalmente menos racionales que los hombres; continúas criticando todos los errores que una mujer puede cometer, como escoger a un hombre que la trate mal (un hombre como tú o cualquiera de tus seguidores), y luego tienes las bolas de decir que la razón por la que preferirías que todos tus familiares femeninos tuviesen un guardián masculino, es porque las amas. Wow, Roosh, gracias pero no gracias, estamos bien sin tu amor.
Por cierto, si tú pudieses ser el guardián masculino de todas las mujeres de tu vida, asumo que las protegerías de la clase de hombres que te siguen, ¿no? ¿Eso no te convierte en un hipócrita? ¿O cuál es? Porque déjame decirte que cuando tú agarras tu computadora y empiezas a escribir para que todo el mundo te lea, tienes una responsabilidad con la sociedad, y no deberías ser tan imprudente con ella. Lo más escalofriante de todo es que de hecho tienes a gente escuchándote. Mientras mayor es la audiencia, mayor es la responsabilidad; y promover ideas injustas y peligrosas no es manera de honrar eso, las creas verdaderamente o no.
Ya que me estoy tomando la libertad de hacer preguntas (que Dios nos proteja), déjame preguntarte otra cosa, ¿si las mujeres son más irracionales y propensas a cometer errores, entonces por qué, en los Estados Unidos, el 93.3% de los reclusos son hombres, y el 6.7% son mujeres? Estas son cifras del Federal Bureau of Prisons. ¿Y por qué, entonces, está la gente huyendo de esos países que se apegan a tu visión utópica de la sociedad, y están buscando la felicidad en naciones lideradas por mujeres, como Alemania, Dinamarca y Noruega? (A quienes les está yendo muy bien, por si no lo sabías.) Si quieres continuar por este camino, deberías investigar los hechos reales y no basarte únicamente en tus propias experiencias personales, porque ellas solo te llevan a decir cosas como: “Me siento mal por los hombres –de Dinamarca-, quienes pagan impuestos tan elevados por mujeres tan feas” (porque, tú sabes, para eso es que son los impuestos).
Estos son apenas algunos de los hechos que comprueban que estás equivocado. Tú, por el contrario, no presentas ninguna clase de evidencia que apoye tu pensamiento fascista, incluyendo tu declaración de que las mujeres son biológicamente menos inteligentes que los hombres. Cuando afirmas algo así sin pruebas fácticas, pareciera que estuvieses ejerciendo estadística rectal (porque lo estás haciendo).
No deseo agregar más que la siguiente referencia a la Ley de Brandolini, también conocida como The Bullshit Asymmetry: “La cantidad de energía que se requiere para refutar una idiotez (o paja, como le diríamos en Venezuela), es de una orden de magnitud mayor que para producirla”. Y ya excedí mi límite de caracteres.
Sinceramente,
Cristabelle García