Licenciada en Contaduría, dejó de lado los números para fomentar el emprendimiento juvenil, dándole forma a su causa: Creando Empresas; un proyecto que se renueva con cada generación de jóvenes que descubren y aprenden las herramientas para crear su primer proyecto
Xalapa, Veracruz
Ariadna Aguilar es Licenciada en Contaduría con mención honorífica, por la Universidad Veracruzana de México. De su carrera, además del título, quedó el Testimonio de Alto Rendimiento Académico. Se hizo Maestra en Economía y Negocios en la Universidad Anáhuac, con Medalla al Mérito y también logró mención de Alto Rendimiento Académico. Pero, más allá de los números y los cálculos, la espinita de la docencia se movía en sus neuronas. Entre diplomados y cursos relativos al tema educativo, llegó a la Secretaría de Educación de Veracruz, donde implementó diversos sistemas de control interno en el área financiera y en la subdirección de telesecundarias.
—Contadora y Maestra en Economía ¿Bastan ambas para crear o enseñar cómo crear empresas?
—Tomé un curso de Alta Dirección de Empresas y Comunicación en la Universidad de Vigo, en España— cuenta Ariadna, modesta y sonriente.
Y es que sus títulos, que parecen no acabarse, convergieron para darle forma a su causa y trabajar sobre ella. Para Ariadna, la palabra emprendedor tiene muchas aristas, pero afirma que la juventud es el núcleo de todo emprendedor. Así ideó Creando Empresas, un proyecto diseñado para jóvenes de preparatoria que tengan algún proyecto o negocio que quieran acometer.
—¿Cómo surge Creando Empresas?
—En mi primer año como docente de la asignatura de Administración. Fue en una preparatoria pública que, como muchas en México, sufría carencias que afectaban a los jóvenes, restándoles oportunidades de crecimiento. Así, dentro de las actividades, implementé la creación de empresas ficticias y luego pensé en que mejor sería crear un proyecto formal y presentarlo en un concurso, motivando más a los estudiantes pero sobre todo, sembrando en ellos la semilla del emprendimiento y la innovación.
—Es una buena edad para fomentar esa rama, ¿cierto?
—Es excelente. Muchos de ellos ya no estudiarán un nivel superior y tendrán que buscar empleo. Sin muchas opciones por delante, es conveniente la idea de auto emplearse y Creando Empresas les otorga las herramientas necesarias para acometer sus proyectos.
Habla con la propiedad de quien sabe cómo funciona la nomenclatura de su fórmula. En las tres ocasiones que ha llevado a cabo Creando Empresas, jóvenes del sexto semestre de preparatoria presentan proyectos de ideas de negocios desarrollados a lo largo del semestre en la asignatura de Administración “y se dedica un día al espíritu del emprendedor”.
—¿En qué consiste ese día?
—Se hacen conferencias, se invitan empresarios, a la Secretaría de Economía y demás organismos relacionados con el tema.
Todas las ideas son bien recibidas
Ariadna es una mujer de negocios y una docente entregada. Como tal, entiende que la palabra emprendedor está de moda, “desde hace mucho”, dice. Sin embargo, aclara que “hoy más que nunca ante la contracción económica del país y los problemas que esto conlleva, entre ellos el desempleo, es necesario dejar de lado la cultura paternalista y cambiar la mentalidad de la juventud para que sepa cómo crear su empresa, pequeña, mediana o grande, no importa. El objetivo es expandir sus horizontes”, afirma.
La enseñanza Kybernus
— ¿Cómo ha cambiado tu liderazgo o visión de liderazgo después de participar en una experiencia como Kybernus?
—En primera instancia, los talleres mejoraron mi perspectiva de lo que es el liderazgo responsable. Mis áreas de conocimiento se ampliaron en el aspecto teórico y práctico. Muchas veces me sentía sola en mis ideas de cambio, pero al entrar en contacto con personas con ideas similares, surgió la motivación de continuar con mis ideas.
Detrás del éxito de su proyecto, Ariadna admite haber llegado a la docencia por azares del destino. “Al impartir clases de administración surgió una vorágine de ideas que poco a poco fui llevando a cabo. Pero nada de ésto estaba planeado cuando entré por primera vez a un aula en papel docente”. Se afirma veracruzana y xalapeña de corazón, dice que ahí se queda por el momento, “aunque mis proyectos van más allá”.
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