Silvia, Cauca fue alguna vez un pueblo avasallado por la violencia, un pueblo donde la vida parecía una hazaña de héroes inverosímiles. Ahora han quedado algunos vestigios de la guerra, pinceladas de dolor que intentan sobreponerse sobre el paisaje idílico de un pueblo renacido. Mirar sus montañas y ser testigo de la imponencia, el verdor y su silencio hacen regocijar el alma.