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arturo serna
Photo by: Jan Michellardi ©

Bondad y maldad

¿Es un logro ser bueno? Es decir, ¿ser bueno es el resultado de un propósito? Si una persona es buena como el resultado de una decisión y de una intencionalidad podríamos suponer que ser bueno es un logro, un objetivo cumplido. En ese caso, habrá algunas personas que logren ser buenas y otras que no lo logren. Podríamos medir la calidad de la bondad o la mayor o menor bondad de un individuo.

También podemos partir de la hipótesis opuesta. Una persona no se propone ser buena sino que lo es antes de tomar la decisión de serlo. En ese caso, que alguien sea bueno no depende de él sino que está inscripto en su código genético, en su ADN. No hay mérito en la bondad. Y los que no sean buenos podrán decir que no han elegido ser malos sino que es el resultado de una determinación genética. Por tanto, estarán libres de responsabilidad.

¿Cómo surge la bondad? ¿Está inscripta en nuestra biología? ¿Qué significa ser bueno? Rousseau tiene una respuesta: alguien es bueno por naturaleza y la sociedad corrompe esa bondad originaria. Hobbes parte de la idea opuesta: el individuo es dañino por naturaleza y las leyes civiles intentan corregir la tendencia natural.

¿Qué podríamos decir de la bondad en el mundo globalizado, en el mundo que nos ha tocado vivir? ¿Las religiones son una ayuda, son diques que frenan una cierta tendencia hacia el mal?


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